Los puntos más relevantes a considerar son la legibilidad y la cohesión (cómo interactuan las palabras para formar frases y párrafos.)
1. Elegir una fuente con letras de ancho similar. Esto mejora la legibilidad del texto y su fluidez.
2. La altura de las letras debe ser media, ni muy alta ni muy corta, para evitar que se vea demasiado densa.
3. Las letras deben tener pequeñas variaciones, las cuales no deben de ser ni muy finas ni muy uniformes.
4. Se deben evitar las fuentes cuyas letras se reflejen en otras como si fuera un espejo (db qp).
5. Los espacios dentro de las letras no deben ser mayores que éstas, pues hacen que el texto pierda fluidez.
6. Las letras estrafalarias hacen que resulte cansado leer el texto. Son geniales para los títulos y las portadas, pero no para el texto en sí.
Las siguientes 4 fuentes son las más recomendables:
- Adobe Caslon
Es primera opción para los libros. Es la más legible.
- Adobe Garamond
Posee legibilidad y elegancia.
- ITC Stone Serif
Es aburrida de ver, pero fácil de leer. Está diseñado para un ajuste excepcional.
- Janson Text 55 Roman
Es el punto medio entre la elegancia de Garamond y lo clásico de Caslon. Es más redonda y densa.